En términos mundanos el signo de Cáncer se relaciona a los afectos, la familia y los apegos, todo ello vinculado a la forma emocional de vincularse del tercer centro ( por oposición a la forma no condicionada por las necesidades propias, que caracteriza al corazón). La tarea es en este signo, purificar de posesividad los vínculos de amor. En términos espirituales Cáncer se relaciona con la conciencia de Anahata el amor incondicional y la posibilidad de contactar con el Maestro.

El sentimiento que la asociación al corazón ofrece es el de ser cuidados por la Gran Madre, en Cáncer a nivel superior hay conexión con Neptuno. Cáncer es el aspecto madre del zodiaco, estamos en un gran Festival, el del Ángel solar regresando a casa. Así como su contraparte Capricornio es la salida del Ángel Solar de la materia, Cáncer es el nacimiento, la entrada.

“En cada año solar ocurre el descenso de un dios solar en el mes de Aries, equinoccio de primavera. El dios de la Vida y el dios de la luz entra en nuestro sistema, es un mensaje de esferas superiores.

La energía, el mensaje, entra en Aries a través de Shamballa. En Tauro es asimilada por la Jerarquía. En Géminis los discípulos la transmiten a la humanidad.

Citando el resumen del ciclo anual que nos da Sri Parvathi Kumar:
“El movimiento del ángel solar en cada uno de nosotros:

En Aries entra por nuestro 7º centro
En Tauro por la frente.
En Géminis por la garganta.
En Cáncer por el corazón.

Esto lo hace cada año, cada mes representa un aspecto del viaje del Angel solar, él representa el corazón del sol, la relación es con el corazón del sol, accedemos a esa luz.

Cuando transita por cada signo la parte correspondiente del cuerpo se ilumina. En Cáncer hemos de sentir la luz en el corazón. Es lo que llamamos la joya en el pecho. Si deseamos unirnos a la naturaleza debemos seguir los festivales de forma anual. Antiguamente eran considerados esenciales. Tenemos que relacionarnos con las luminarias.

El Sol – luz, vida.
La Luna: Germinación, crecimiento a través del sol.

LOS FESTIVALES Y LA JERARQUIA

El trabajo fundamental de la Jerarquía es recuperar los festivales más antiguos y asegurarse de que la humanidad los lleve a cabo. (Se llevaban a cabo hasta hace 2 mil años).

Para relacionarnos con la gloriosa luz del Sol:

El Equinoccio de Aries  – es un festival de 3 días – 20-21-22 Marzo.
El sol está en la cabeza.

El solsticio de Verano – es un festival de 3 días – 20-21 -22 Junio.
El sol está en el corazón.

El Equinoccio de Otoño – es un festival de 3 días – 20 -21- 22 Setiembre.
El sol en el Plexo Solar.

El solsticio de Invierno – es un festival de 3 días – 21 -22- 23 Diciembre.
El sol esta en el centro superior del corazón.

Es necesario consagrar estos días a la vida subjetiva ( no externa) idealmente a actividad de grupo porque son los 4 puntos cardinales.

Ciclo de Aries a Escorpio – el sol desciende por Shushumna

Leo – diafragma
Virgo – entre diafragma y ombligo
Libra – ombligo
Escorpio – genitales.

Ciclo de Sagitario a Piscis – el sol asciende por Shushumna.

Sagitario – Muladhara superior
Capricornio – Centro superior del corazón
Acuario – parte superior de la frente
Piscis – sobre la cabeza, así acaba el ciclo.

Necesitamos saber su ubicación en nosotros,  es la ciencia de la correlación «Niasa vidya” es la forma para relacionarse con la radiación del Padre del Sistema solar.

LA PROTECCION QUE OFRECE CÁNCER

Para la entrada en Cáncer hay que ser cauto – entramos en un mundo de reflejos, un mundo aparente. Vemos lo que queremos ver, no lo que hay. La luna es el Sr de Cáncer – sólo ves el reflejo – al ser agua hay refracción. Cada uno de nosotros es un alma pero ¿vemos al alma cuando vemos al otro? ¿No nos pasa acaso, que vemos cualquier otra cosa? Todos son un alma envuelta en una forma, pero la verdad es fácilmente olvidada.

¿Cómo superamos esto? ¿Cómo hacemos para que el Señor se quede en el corazón? Si meditamos en el sol en el corazón iluminamos toda la personalidad. Así puedes ver las otras almas con sus luces.

La recomendación de la sabiduría es que recordemos que antes de iluminar el entorno tenemos que iluminarnos nosotros;  sólo una vela encendida puede encender otra vela. La vela encendida es el Maestro; a Cáncer se le llama el Solsticio del Maestro, la Luna Llena del Maestro. La presencia del Maestro en el corazón es la gran bendición que nos llega en Cáncer.

Se nos advierte que el siguiente Festival (Equinoccio de Otoño), podría ser de oscuridad excepto si uno ha recibido la luz en Cáncer. Libra es el punto más bajo, la serpiente ha descendido al punto más bajo del árbol, y de allí toma movimiento horizontal, la serpiente de Kundalini, la energía del sol, se mueve horizontal y tiende a expresar la dimensión animal de apego a la materia y al cuerpo. El peligro del equinoccio de otoño se neutraliza si se recibe la luz en Cáncer. Quienes tienen la luz del ángel solar en el corazón, pueden pasar por Libra sin ser afectados, sin que la pasión del mundo les afecte. La pasión tiene que ver con tres grandes pruebas: Dinero – Comodidad y Sexo.

Los que no se ven afectados por la pasión llegan al sol en Capricornio y son salvados, a los rayos del sol en Capricornio de les llama la sangre del salvador.  En Capricornio el sol se eleva y nos eleva con él. Así es como hay entrada y salida del sol.

EL MAYOR REGALO

“La presencia del Maestro en el corazón debe ser considerada como el más grande regalo, no es necesario que nosotros ascendamos hacia Él; Él desciende y entra en el salón principal de la casa. Incluso si fuera un maestro de sabiduría lo consideraríamos una presencia sagrada, es el Señor mismo quien desciende.
La casa es la personalidad, la sala principal es el corazón.

Hemos de empezar el diálogo con el Maestro como un monólogo, no repitamos siempre nuestras oraciones y mantras, al Maestro le aburre. Nos ha dado Su presencia y nosotros no le hablamos…

Que el mes de Cáncer sea bien empleado, Le podemos hablar de aquellas cosas esenciales en nuestra vida, cosas sobre las que deseamos consejo, nuestros anhelos, sobre nuestros seres queridos, a medida que estamos abiertos a Su presencia las dificultades ya no se ven como tales, la perspectiva cambia, la neutralidad se logra, la habilidad aumenta y nuestra capacidad de ser un sostén en nuestro entorno crece.

Relacionémosnos intensamente y el Maestro se quedará en el corazón todo el año”. Parvathi Kumar

UNA AFIRMACION : 12 AÑOS

La jerarquía insiste en que sigamos los 4 festivales tal y como se dan en la naturaleza. Si seguimos estos rituales y las meditaciones de Luna Llena y las de Luna Nueva durante 12 años el sistema se armoniza con el sistema solar. No ocurrirá de ninguna otra forma; tu devoción, tu estudio, tu oración, no te llevarán a ello.” Parvathi Kumar.

La asimilación de la luz

Para que nuestro cuerpo asimile la luz, necesita que el alimento que se ingiere esté lleno de luz – vegetales frescos y frutas que han recibido grandes cantidades de rayos solares, y también agua fresca y jugos. Con buenos materiales, el tejido corporal se refina y podemos construir cuerpos delicados pero poderosos. Las Escrituras, por lo tanto proponen que desde el Solsticio en delante, reorganicemos nuestra dieta, hacer respiraciones conscientes y profundas y absorber los rayos Solares a través del cuerpo. Esto permite un mejor flujo del Prana y construimos una casa ligera y llena de luz para vivir en ella como almas. Es como si volviéramos a entrar de nuevo en las formas de nuestro cuerpo. Nuestras casas deberían también ser puras, llenas de luz y limpias.

Los primeros cuatro grados en Cáncer

Son de importancia particular, si por la correcta orientación, invocamos al Señor hacia nosotros, Él viene y habita de nuevo en nuestros corazones.

 

Isabella Di Carlo