Aceptar y agradecer lo que ha sido nuestra existencia puede reconciliarnos con nosotros mismos y dejar una huella imborrable en el corazón de los demás. Cada cosa, positiva o menos positiva, nos ha ayudado a ser quienes somos: ese ser único e irrepetible.
Cuando perdemos a un ser querido, el duelo es un estado psicológico que facilita poco a poco aceptar la pérdida y adaptarse a una vida sin esa persona querida. No se trata de olvidar al ser amado, pero poco a poco comprendiéndolo y entendiéndolo como parte de la vida, nos permite comprender y activar nuevos mecanismos para encontrarnos serenos de nuevo en el mundo.
De ambos temas, nos hablará la Dra. Maria del Pilar Salazar, para que nuestro propio partir y el de nuestros seres queridos, sean un proyecto de vida.
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